miércoles, 3 de septiembre de 2008

Warning!!

No me gustan los chicos malos. Se dice que al final siempre nos enamoramos o interesamos en el chico que “nos da caña”, y que ellos son iguales con nosotras, que les gustan las malas. A Mi no me gusta ni dar ni que me den caña. Me gusta estar bien y estar a gusto. Estas situaciones en las que de repente me veo envuelta jamas son premeditadas, siempre actuo con la esperanza de que todo salga bien, de que seamos felices para siempre y que jamas jamas haya una palabra mas alta que la otra. Y siempre SIEMPRE me ilusiono tanto con esa persona que creo que es “EL”.
Como a los 21 o 22 años decidí que a mi ya no me toreaban (o eso creí) que dejaría de lado a los chicos malos y que quería estar tranquila. Tras un the one con el que tuve una relación secreta empezando el al día siguiente de dejarme (por mensaje obviamente, pero tanto lo borre que hasta lo borre de mi cabeza) con una novia con la que duro mas de dos años. Tras el musculitos que resulto seguir enamorado de su novia anterior y que me dejo una noche de fin de año (en la misma fiesta) y tras el monito que resulto tener problemas terribles en casa y termino conmigo a los 15 días de empezar pidiendome tiempo, tiempo que accedí a darle y que resulto que a los tres meses me entere que a los dos dias estaba en su salsa con otra.. tras este panorama decidí que o los veía buenos de primeras o fuera fuera que no te quiero ver.
Tras enterarme lo que el monito había hecho no pasaron muchos meses hasta que un chico empezó a rondarme (a día de hoy le conocemos como mi ex, así que ya te destripo el final). Era gafapastero divertido y cuando me veía se le iluminaba la cara. Además tenia una cara de buena gente tremenda y sabia que a mis amigos les iba a caer increíble (el tema de solo tener amigos y no amigas hace que el momento “presentación de novio” sea algo mas difícil de lo normal. A mi me pasa con ellos, a ellos les pasa conmigo y por ahora tan mal no nos va). Me invito a pasar un fin de semana en la sierra. El, sus amigos de clase. Yo y una compañera de clase. Todo salio estupendo y volvimos a Madrid de la mano.
En esa semana quedamos otra vez. Quedamos en un bar con amigos suyos, y cuando llego mi hora de irme me acompaño hasta la parada y le dije que como vivía sola (en ese momento vivía sola) se podía venir cuando quisiera. Se quedo encantado y dijo que la próxima. Llegue a mi casa y a las 4 de la mañana recibí un mensaje:
“Creo que te quiero, no es por el pedo de verdad”
6 días habían pasado desde que lo conocí y en ese momento me pareció la declaración perfecta, no lo vi raro y no vi mas allá de lo que decía. Yo buscaba una relación bien, un chico que me quisiera y ahí estaba.
La próxima vez que me pase, por favor, pateame hasta que sangre.

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